Queridos amigos y amigas.
A continuación os detallaré mi intervención en la primera pregunta parlamentaria que recibe la Ministra Cristina Garmendía en las sesiones de control del Gobierno en el Senado.
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Sr. Ministra, fue precisamente un Gobierno Socialista, el que en el año 1986 impulsó la ciencia, la tecnología y la innovación en nuestro país. Y lo hizo con la Ley de Ciencia que se encuentra en vigor desde entonces.
Los Socialistas hemos entendido siempre que la inversión en investigación, desarrollo e innovación crea un empleo más estable y de mayor calidad.
Pensamos también que los descubrimientos científicos y los avances tecnológicos deben estar en conexión con las necesidades del tejido productivo de la economía, para poder así trasladar el desarrollo científico al crecimiento económico y al progreso social. Objetivo en el que también es necesaria una nueva orientación de nuestra Universidad.
La pasada legislatura, doblamos la inversión en I+D+i sobre lo dedicado por el PP en sus últimos cuatro años, y pusimos en marcha la iniciativa Ingenio 2010. Ahora nos planteamos el reto de llegar hasta los 48.000 millones de €, volviendo a multiplicar por dos la inversión.
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Los Socialistas hemos entendido siempre que la inversión en investigación, desarrollo e innovación crea un empleo más estable y de mayor calidad.
Pensamos también que los descubrimientos científicos y los avances tecnológicos deben estar en conexión con las necesidades del tejido productivo de la economía, para poder así trasladar el desarrollo científico al crecimiento económico y al progreso social. Objetivo en el que también es necesaria una nueva orientación de nuestra Universidad.
La pasada legislatura, doblamos la inversión en I+D+i sobre lo dedicado por el PP en sus últimos cuatro años, y pusimos en marcha la iniciativa Ingenio 2010. Ahora nos planteamos el reto de llegar hasta los 48.000 millones de €, volviendo a multiplicar por dos la inversión.
Inversión que sólo dara resultado si sirve de capital palanca, que incentive y promueva la inversión privada. Pues sólo así se alcanzará nuestro ambicioso objetivo de situar a España en la Champion League de las potencias líderes en la investigación mundial.
Sr. Ministra, el Gobierno al que usted pertenece, ha dado muestras inequívocas de estar preparado para liderar este proceso de gestión del cambio del patrón de crecimiento de nuestra economía en el que estamos inmersos. Y por todo ello quiero preguntarle:
¿Cómo valora el gobierno el desarrollo actual del VI Plan Nacional de I+D?
RESPUESTA DE LA MINISTRA, CRISTINA GARMENDÍA:
Gracias, Señoría, por su pregunta que me permite exponer ante esta Cámara el impulso que el Gobierno Socialista ha dado a la investigación científica, desarrollo e innovación tecnológica durante estos últimos años.
El nuevo Plan Nacional 2008-2011, el sexto, para cuyo diseño y elaboración se ha contado con la participación de todos los actores clave del Sistema Español de Ciencia – Tecnología – Empresa ha tratado de superar el modelo convencional basado en áreas temáticas para evolucionar hacia un modelo basado en los instrumentos, que se han definido de acuerdo a los objetivos estratégicos y operativos fijados por la Estrategia Nacional de Ciencia y Tecnología.
En este sentido, la puesta en marcha del nuevo Plan Nacional, en el que se establece una relación directa entre objetivos e instrumentos, alejándose del enfoque exclusivamente temático ligado a una lista de campos de investigación o de sectores empresariales susceptibles de recibir ayudas públicas, le convierte en un conjunto de instrumentos de apoyo a la investigación, el desarrollo y la innovación indicados para alcanzar los objetivos fijados en el horizonte del año 2011, entre los que cabe señalar alcanzar un 2,2% de gasto en I+D sobre el PIB y que un 60% de este gasto sea ejecutado por el sector empresarial.
Así, se ha puesto en marcha la reducción del número de instrumentos y de convocatorias, evitando la duplicación de solicitudes y evaluaciones, con el consiguiente beneficio para los solicitantes de ayudas. En el nuevo Plan, las convocatorias se agrupan en seis líneas instrumentales y en trece programas nacionales, a los que cabe añadir las cinco acciones estratégicas.
Se están cumpliendo los objetivos marcados, ya que han sido publicadas en una única orden de bases, cinco de las seis líneas instrumentales de actuación (LIA) existentes y en cuanto a los 13 programas nacionales, se han convocado ya en este primer semestre 10 de ellos.
Finalmente, se ha pasado de las 133 convocatorias relacionadas con el anterior Plan Nacional publicadas en el BOE en el primer semestre de 2007, a las 13 publicadas en este mismo período en 2008. Este año no se ha publicado ninguna convocatoria que no estuviera planificada, frente a las 48 que se publicaron en este periodo en 2007, sin que estuviera previsto en el programa de trabajo del último año de vigencia del Plan anterior.
Por consiguiente, debe valorarse muy positivamente el desarrollo del VI Plan Nacional de I+D+I en estos primeros seis meses de vida, y estoy segura de que las mejoras señaladas y la nueva estructura del Ministerio de Ciencia e Innovación redundaran todavía en una mejor gestión del nuevo Plan Nacional, estableciendo una división más clara entre el diseño y la financiación de programas, por una parte, y su gestión, por otra.
El nuevo Plan Nacional 2008-2011, el sexto, para cuyo diseño y elaboración se ha contado con la participación de todos los actores clave del Sistema Español de Ciencia – Tecnología – Empresa ha tratado de superar el modelo convencional basado en áreas temáticas para evolucionar hacia un modelo basado en los instrumentos, que se han definido de acuerdo a los objetivos estratégicos y operativos fijados por la Estrategia Nacional de Ciencia y Tecnología.
En este sentido, la puesta en marcha del nuevo Plan Nacional, en el que se establece una relación directa entre objetivos e instrumentos, alejándose del enfoque exclusivamente temático ligado a una lista de campos de investigación o de sectores empresariales susceptibles de recibir ayudas públicas, le convierte en un conjunto de instrumentos de apoyo a la investigación, el desarrollo y la innovación indicados para alcanzar los objetivos fijados en el horizonte del año 2011, entre los que cabe señalar alcanzar un 2,2% de gasto en I+D sobre el PIB y que un 60% de este gasto sea ejecutado por el sector empresarial.
Así, se ha puesto en marcha la reducción del número de instrumentos y de convocatorias, evitando la duplicación de solicitudes y evaluaciones, con el consiguiente beneficio para los solicitantes de ayudas. En el nuevo Plan, las convocatorias se agrupan en seis líneas instrumentales y en trece programas nacionales, a los que cabe añadir las cinco acciones estratégicas.
Se están cumpliendo los objetivos marcados, ya que han sido publicadas en una única orden de bases, cinco de las seis líneas instrumentales de actuación (LIA) existentes y en cuanto a los 13 programas nacionales, se han convocado ya en este primer semestre 10 de ellos.
Finalmente, se ha pasado de las 133 convocatorias relacionadas con el anterior Plan Nacional publicadas en el BOE en el primer semestre de 2007, a las 13 publicadas en este mismo período en 2008. Este año no se ha publicado ninguna convocatoria que no estuviera planificada, frente a las 48 que se publicaron en este periodo en 2007, sin que estuviera previsto en el programa de trabajo del último año de vigencia del Plan anterior.
Por consiguiente, debe valorarse muy positivamente el desarrollo del VI Plan Nacional de I+D+I en estos primeros seis meses de vida, y estoy segura de que las mejoras señaladas y la nueva estructura del Ministerio de Ciencia e Innovación redundaran todavía en una mejor gestión del nuevo Plan Nacional, estableciendo una división más clara entre el diseño y la financiación de programas, por una parte, y su gestión, por otra.
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